Ancelotti ya no es el entrenador que el Madrid necesita

Emiliano Gómez

Carlo Ancelotti es, sin duda, uno de los entrenadores más importantes y exitosos del Real Madrid en los últimos años. Nadie puede negar que logró algo muy especial: ganar la tan esperada Décima Champions League en su primera etapa con el club blanco. Además, en su momento, trajo tranquilidad y estabilidad a un equipo que estaba pasando por una etapa complicada. También hay que reconocer que supo manejar un vestuario lleno de estrellas, egos y mucha presión, algo que no es nada fácil.

Foto de Carlo Ancelotti del Diario Marca

 Y si bien los resultados en esta segunda época son todavía mejores que en su primer mandato enfrente del club blanco  ganado  2 Copas de Europa, 2 Ligas, 1 Copa del Rey, que pudieran  ser dos a la espera de la gran final ante el Barcelona entre otros títulos, pero da la sensación que el equipo está perdiendo la identidad que le  caracteriza día tras día y eso es un  no negociable tanto para la junta directiva del club como para los millones de aficionados en todo el mundo, es evidente que en el fútbol se gana y se pierde, pero hay formas de perder y de competir, Es una realidad que cuando el  equipo cae en una fase importante  no solo pierde, le pintan la cara y el equipo da vergüenza en el campo.

Repasemos  las últimas dos caídas importantes del club blanco en la Champions League viajemos a la edición 2022-2023 el Madrid se planteaba en las semifinales en busca de reivindicar la corona que había conseguido el 28 de mayo del 2022 cabe aclarar que esa Champions es surrealista, es completamente inexplicable como el Madrid la gana,  jugando un fútbol paupérrimo, pero con un ADN de remontar partidos cuando más cuesta arriba se ponían, eliminatoria tras eliminatoria la superaban con remontadas memorables, es como si Dios bajara al campo al minuto 90 y ganara el partido por ellos, pero es verdad que cuando ganas te da igual si es jugando mal, pero era claro que un día la suerte se iba a acabar y todo este mal preparamiento táctico le iba a pasar factura al club,  llegaba esa semifinal ante el Manchester City, el club de Inglaterra venía con sed de revancha por la eliminación del año pasado  y el partido de ida en el Santiago Bernabéu acabaría en empate por marcador de 1-1, el guion del partido fue un dominio abismal del equipo de Guardiola, pero que una genialidad de Inicios le daría algo de esperanza al madridismo y otra vez toda la afición se ilusionaba y no por los argumentos futbolísticos sino por la historia del club y que la Champions es su competición por excelencia, pero sé sabia que había muy pocos argumentos tácticos y que el estilo de juego era nulo, llegaba el 17 de mayo del 2023, tras una semana de especulación Ancelotti sacaría una  alineación que nadie lo entendía, metiendo a jugadores fuera de posición y dejando fuera de la alineación titular a jugadores que venían jugando a lo largo de la temporada es como si antes del partido empezaban a aparecer fantasmas, y dicho y hecho la suerte un día se iba a acabar y ese día se llevaron una goleada apoteósica, derrota por marcador de 4-0 en el Ethiad Stadium, el tema no es perder ante el que en ese momento era el mejor equipo del momento,  pero la cara que dio el equipo fue de teatro, Ancelotti sé que daba frío, hacia cambios sin sentido haciéndole  entender a la afición  que no le importaba lo que estaba pasando, los jugadores caminado en el campo y eso es en 90% responsabilidad del entrenador, demostrando que no había estudiado el rival y únicamente había apelado a la experiencia de los jugadores y cuando te enfrentas a un equipo de verdad si tú no tienes un plan de juego te va a pasar lo que ese día aconteció, no obstante respetando su trayectoria el club le daría el voto de confianza a al entrenador italiano  continuidad al frente del equipo de la capital Española.  

Foto de Carlo Ancelotti del Confidencial

La temporada 23-24 empezaba en una incógnita, lesiones claves y  con la llegada del joven inglés Jude Bellingham como el fichaje bomba de ese mercado  y el famoso fichaje para sustituir a Karim Benzema Joselu Mato un viejo lobo de mar que empezó en la cantera del club, pero que tenía ya una carrera establecida en el fútbol  español, en un inicio este fichaje fue todo un meme, y quién diría que sería el encargado de volver a salvar al Madrid, pero eso es historia para más adelante, la temporada empezaba en la catedral del fútbol en San MAMÉS   y la tónica era la misma el equipo ganaba in extremis, pero jugando un fútbol plano y eso es la responsabilidad del entrenador italiano, el 28 de octubre de 2023 tendrían  su primera prueba de fuego cuando enfrentarían al Barcelona el denominado Clásico del mundo, el equipo blanco se llevó la victoria, pero como no podía ser de otra forma volvían a ganar gracias a un gol en el tiempo de compensación y como dije anteriormente cuando ganas se te olvidan los errores, la campaña seguía en marcha el equipo ganaba, pero seguía  sin gustar y con la plantilla del club y la exigencia y responsabilidad  que es entrenar al club más importante en la historia del deporte  es una falta de respeto no tener un mínimo de sello táctico, el tramo final de temporada  llegó y como no podía ser de otra forma en el mes de abril se volverían a ver las caras con el City de Pep Guardiola, en esa ocasión en los 4tos de final, el encuentro de ida fue una montaña rusa de emociones, de esos partidos que enamoran lleno de goles el partido acabaría 3-3 y dejaría con medio pie a los ingleses en la semifinal, tras siete  largos días de nerviosísimo llegaba el partido de vuelta y desde las alineaciones todo el mundo entendía que el equipo español se iba a defender como pudiera y a la contra iba a buscar un gol, en los primeros minutos la estrategia parecía salir a la perfección Rodrygo anotó un gol que le dio esperanza al club, pero el aficionado era consciente que los siguientes 70 minutos iban a hacer un baño descomunal del Manchester City y así fue el Madrid no volvió a cruzar el campo con balón controlado, de manera inexplicable aguantaron la presión para irse al medio tiempo arriba, pero era alucinante el paseo que les estaba dando el club inglés, la segunda parte sería lo mismo llegada tras llegada del CITY, pero simplemente el Madrid lograba resistir la presión, esa suerte se acabó faltando 15 minutos y los SkyBlues empataban el partido, la sensación desde fuera era que en esos minutos restantes se podían llevar como mínimo un par de  goles más y caer eliminados, no fue así y los de blanco forzaban el tiempo extra, pero sin un mínimo de entendimiento táctico y como hacerle daño a su rival. La prórroga sería idéntica llegada tras llegada de los ingleses, pero otra vez parecía que DIOS es del Real Madrid porque la pelota no entraba, se iban a los penales y de manera surrealista el Madrid avanzaba y otro más año iban a jugar Semifinales del torneo más importante a la gente parece que le daba igual lo cobarde que se vio el club más importante en el deporte, en esta ocasión los caminos llevaron a los blancos a enfrentar al poderoso Bayern MÚNICH, el partido de ida fue un ida y vuelta, los blancos salieron bien parados sacando un importante empate  a 2 goles, llegaba el partido de vuelta y la capital española se paralizaba, un partido muy disputado, pero sería la escuadra teutona que se ponía por delante a 15 minutos del final, y otra vez el Madrid que sin jugar a absolutamente buscaría apelar a la épica y conseguir lo anormal en normal, al minuto 80 se preparaba para salir al campo Joselu Mato ese fichaje en verano fue el meme entre todos los antimadridistas  y que todos los medios cuestionaron, pues fue el quién al minuto 87 enchufo un remate y empataría la eliminatoria y 4 minutos después sería el quién anotaría el gol de la victoria y otra vez sin jugar a nada el Madrid llegaría a otra final, vámonos a Londres al mítico Wembley donde los merengues se verían las caras ante el Borussia Dortmund que fue la revelación la campaña pasada, y los primeros 60 minutos de esa final son un baño tanto en posesión, llegadas de gol y estilo de juego de los alemanes pero gracias a un Courtois, que entro en modo demonio le impidió el gol a los alemanes y dos chispazos  le bastaría a los blancos para consagrarse campeones, y como he dicho cuando ganas es difícil cuestionar, pero lo que era una realidad es, que el no tener un mínimo de planteamiento y de estudiar a tu rival tarde que temprano te cobraría factura.

Llegaba el inicio de temporada y el club blanco se reforzó con el para muchos mejor del mundo, el francés Kylian Mbappé, pero habían también sufrido bajas muy sensibles como el caso de Nacho, Kroos, Joselu entre otros.  La temporada empezó con una presentación desastrosa en Mallorca jugando fatal, pero era entendible que se estaban haciendo ajustes y que era cuestión de tiempo que el equipo empezara a hacer la máquina de gol que en teoría debería de ser con la calidad de plantilla que tienen, pero no fue así y llegábamos al mes de octubre, llegaba el Clásico y el Barcelona le pasaría por encima ganado por marcador de 0-4 en el Bernabéu un resultado que encendía las alarmas y era un indicativo de lo que sería el resto de temporada, el equipo parecía que mejoraba, pero en enero se llevarían otro baño de agua fría otra vez de manos del Barcelona, en la Supercopa, los blancos se llevarían otra goleada que demostraba que el equipo no tenía un estilo de juego y que urgía un cambio de mano en el entrenador, la temporada continuó y entre altas y bajas llegaría el momento de verse las caras con el Arsenal en los 4tos de final de la Champions League, los londinenses dirigidos por el español Mikel Arteta le plantaron un partido de diez y en la ida el Madrid dio absoluta pena perdiendo 0-3 y el planteamiento de Ancelotti fue desastroso, como iban pasando los días el madridismo empezaba a confiar en la remontada y no por los argumentos en el campo sino por la mística y el ADN, pero nada de eso pasó incluso perdieron el partido para dejar la eliminatoria en 1-5 en marcador global en favor al Arsenal, dando una pena que hace mucho la afición merengue no sentía, la sensación era la de un equipo sin alma, sin estilo de juego y más importante sin ganas de ganar. Y eso es en gran parte responsabilidad del entrenador.

Foto de Carlo Ancelotti de la Cadena Ser

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