Algunos científicos españoles defienden la utilización de animales para la investigación biomédica. Según ha publicado en un documento oficial la Confederación de Sociedades Científicas de España (Cosce) defiende que este “uso de animales en la investigación es vital para el avance de la medicina” ya que los profesores e investigadores de España utilizaron 920.000 animales en 2013.
La Cosce ha levantado la voz para “mejorar la información que se transmite a la sociedad y concienciar a las autoridades” ante el peligro que puede provocar en España el “activismo virulento” contra esta experimentación que en otros países se lleva a cabo.
Algunas autoridades piden “la modificación del Código Penal” para endurecer las penas ante estos delitos porque en la última década, radicales animalistas han enviado cartas bomba al neurocientífico Colin Blakemore, de la Universidad de Oxford (Reino Unido), un centro de investigación biomédica de la Universidad de Hasselt (Bélgica) fue pasto de las llamas por un ataque premeditado y un grupo de seis enmascarados dio una paliza al marido de una bióloga de la Universidad de California (EE UU). Además, algunos grupos activistas contrarios a esta práctica han liberado animales de laboratorios para estropear trabajos científicos de años.

Juan Lerma, cordinador del trabajo y director del Instituto de Neurociencia de Alicante ha explicado que: “No queremos que nuestro documento enfade a nadie, solo queremos informar para que cualquier persona pueda formarse su opinión”. La Cocse, que cuenta con 75 sociedades científicas españolas, alude que la investigación biomédica “beneficia directamente a los propios animales, ya que los tratamientos veterinarios modernos se basan en estos estudios”.
“Por cada animal que se usó en investigación biomédica en España en 2013 se sacrificaron 45 cerdos para alimentación y por cada cerdo que se usó en investigación se consumieron más de 4.400 cerdos en alimentación”, explica detalladamente el documento.

Sonsoles Gonzalo Gutiérrez