Jorge García Yela
Este martes 28 de mayo de 2025, un cayuco con más de 100 migrantes a bordo volcó a solo cinco metros del puerto de La Restinga, en la isla canaria de El Hierro. El accidente ocurrió justo cuando la embarcación iba a ser rescatada por un barco de Salvamento Marítimo. Dos mujeres murieron y una niña fue rescatada con heridas graves. Aún no se sabe si las víctimas fallecieron en el momento del vuelco o durante la travesía desde África.
Según fuentes oficiales, el cayuco transportaba entre 120 y 180 personas, entre ellas mujeres embarazadas y niños. El vuelco ocurrió cuando muchos de los ocupantes se movieron hacia el mismo lado del cayuco mientras intentaban bajar, lo que provocó que se desequilibrara y se hundiera parcialmente. Muchas de las personas a bordo no sabían nadar, lo que generó momentos de mucha angustia.
Los equipos de emergencia, incluyendo Salvamento Marítimo y la Cruz Roja, actuaron de inmediato. Se lanzaron al agua para rescatar al mayor número de personas posible. También ayudaron los vecinos y algunos buzos que se encontraban en la zona. Varios migrantes fueron trasladados a centros médicos para ser atendidos por hipotermia y otras complicaciones. Este ha sido el primer cayuco que llega a El Hierro en las últimas dos semanas, aunque las autoridades europeas ya habían advertido que el flujo migratorio hacia las Islas Canarias podría volver a aumentar. El accidente recuerda otro hecho similar ocurrido hace ocho meses, cuando otro cayuco volcó en el mismo puerto durante una operación de rescate. En ese caso también hubo víctimas mortales.
El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, pidió ayuda urgente al Gobierno de España y a la Unión Europea. “Necesitamos que actúen ya. Lo que está pasando es un drama humanitario. Estas personas solo buscan una vida mejor. Son hombres, mujeres y niños que mueren a metros de la frontera sur de Europa”, declaró. La ruta migratoria que lleva desde África occidental a Canarias es una de las más peligrosas del mundo. En 2024 murieron más de 10.000 personas intentando llegar a España, según datos de organizaciones humanitarias. Eso equivale a unas 30 muertes cada día, un 58 % más que el año anterior.
El presidente del Cabildo de El Hierro, Alpidio Armas, también expresó su tristeza y preocupación. “Es muy duro ver cómo personas pierden la vida por buscar un futuro mejor. Esta es una realidad que nos está tocando vivir y tenemos que enfrentarlo con humanidad y responsabilidad”, dijo. Mientras tanto, las autoridades siguen investigando cómo ocurrió exactamente el accidente. También están trabajando para identificar a las víctimas y prestar atención médica y psicológica a los supervivientes.
Los vecinos de La Restinga han mostrado su solidaridad con los migrantes. Muchos han ofrecido ropa, comida y ayuda a los recién llegados. La isla, aunque pequeña, ha sido uno de los principales puntos de llegada en los últimos meses debido a su cercanía con las costas africanas. Esta tragedia pone una vez más sobre la mesa la necesidad urgente de soluciones para evitar más muertes en el mar. Organizaciones sociales, expertos y autoridades coinciden en que se necesitan rutas migratorias seguras, más recursos para el rescate y una respuesta conjunta de Europa para gestionar esta crisis humanitaria.