Leo Messi y Enzo Fernández catapultan a la albiceleste hacia los octavos de final. El combinado de Scaloni consigue los tres primeros puntos en el Mundial tras su derrota frente a Arabia.
La primera mitad no tuvo muchas ocasiones, Argentina tenía el esférico y los mexicanos esperaban replegados su oportunidad. La albiceleste no convertía en ocasiones su superioridad sobre el terreno de juego y México poco a poco iban cogiendo confianza ante la inocente albiceleste.
El Tri fue creciendo en parcela ofensiva y empezaba a amenazar la portería del Dibu. Ernesto Vega lo probó con un disparo lejano y el Chuki hacía de las suyas con su gran velocidad. Montiel y Acuña sufrían y México crecía y soñaba con una victoria. La primera parte llegaba a su fin y México había crecido. Argentina en cambio sufría.
La segunda parte fue otra historia. Los pupilos de Scalomi salieron decididos a conseguir los tres puntos y aumentaron el ritmo de circulación. México se volvía a replegar y dejaba sus opciones de gol a un solitario Raúl Jiménez. La albiceleste crecía y su hinchada les llevaba en volandas.
Llegaban los minutos finales y Argentina creía en sus opciones. El gol de Argentina estaba al caer y así fue. Una volea impecable de Messi desató la locura argentina en Catar. El 10 creía y Argentina seguía a su líder. México quiso reaccionar tras el gol, pero no fue suficiente. Con más cabeza que corazón los mexicanos no conseguían llegar con claridad a la portería del Dibu. Finalmente Argentina aprovechando la fragilidad defensiva de México puso el 2-0 fimal con un gran zapatazo a la escuadra de Enzo Fernández.