Hugo Hernández Martín, Haizea Ibañez, Jacobo Sierra, Gabriel Bechara y Olivia Belloli.
Este domingo 28 de mayo Podemos se ha quedado fuera del mapa político en España. Alejandra Jacinto, con un 4,79 en las autonómicas, y Roberto Sotomayor, a una décima del 5% de los votos necesarios en las municipales, se han quedado a las puertas de la capital y de la Asamblea. Estos han constituido los peores resultados de la historia del partido.
Las candidaturas de Unidas Podemos han pasado de tener 47 diputados en las asambleas y parlamentos regionales a perder 32 de ellos (ahora con 15), causando una brecha territorial sin precedentes. En el primer territorio tenían 10 diputados en la asamblea regional y aspiraban a irrumpir en el Ayuntamiento. En el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria solo se mantiene una concejala.
Después de conocer los resultados, Jacinto ha dado un discurso en la tarima: “Se confirma lo peor: Ayuso va a seguir siendo presidenta de la Comunidad de Madrid y eso es una muy mala noticia para los que defendemos la sanidad, la educación, el derecho a la vivienda y los servicios públicos en su conjunto”. Hablando más concretamente del partido, Jacinto continuaba con lo siguiente,“Nos debería hacer reflexionar a la ciudadanía y al bloque en su conjunto. Se constata la necesidad de la unidad de las fuerzas progresistas con motor Podemos”
El candidato al Ayuntamiento de Madrid Roberto Sotomayor ha declarado:“Yo, que acabo de aterrizar en la política, veo con preocupación la deriva de la reacción que veo en todo el país. Hay datos muy malos para el bloque progresista. Tenemos la obligación de rearmarnos, sacar cabeza y con orgullo seguir peleando, porque aquí no debe de rendirse nadie”. Un poco después se ha tomado un discurso más positivo: “a veces avanzamos, a veces retrocedemos, pero siempre vamos a seguir empujando”.
«Yo no me rindo. No sé si por mi ADN de deportista, pero no me voy a rendir», comentó Sotomayor a pesar de haberse quedado sin el poder de Cibeles. Este resultado ha sido un golpe para los partidos de izquierda por no lograr la cantidad de votos necesarios para la creación de una coalición.