Mientras en Europa el trono a mejor liga del fútbol gira circularmente entre las tradicionales potencias (Alemania, España, Italia e Inglaterra), en América la MLS (Major League Soccer) de los Estados Unidos busca dar un golpe de autoridad. La liga intenta llevar a cabo un movimiento estratégico al buscar el fichaje del centrocampista catalán Xavi Hernández.
El Diario AS publicó hace menos de una semana una noticia en donde el club New York Red Bulls, equipo donde juega el mallorquín Rubén Bover, hizo explícito su intereses por Hernández. Según la publicación, el gancho de la operación yace en su ex-delantero, Thierry Henry. El jugador francés estableció una buena relación con Hernández, después de su paso por el Barcelona entre el 2007 y el 2010.
La segunda carta que la MLS intenta jugarse es la nueva extension del Manchester City y los Yankees de Nueva York, el New York City, el equipo más nuevo de la franquicia. Al no saber con certeza de que equipo se retirará Hernández, la liga aprovechó para contactarle. El catalán no descarta la posibilidad de fichar por el equipo inglés y jugar en su filial de Estados Unidos.
La MLS está intentado establecer un sistema de competición sólido con jugadores de élite. El fútbol es apenas el cuarto deporte mas popular en los Estados Unidos y ya tiene un historial de fracaso. En 1967 se dio inicio a la competición profesional de este deporte mediante dos ligas: la United Soccer Association y la National Professional Soccer League, las cuales eventualmente se unieron para formar la NASL (North American Soccer League), que ahora semeja la segunda división, el equivalente a la Liga Adelante de España.
A pesar de contar con jugadores de la talla de Pelé y Beckenbauer, la liga no tuvo el éxito esperado y desapareció en 1984. Pasaron 10 años para que el fútbol se organizara nuevamente en Estados Unidos. Después de ser anfitrión de la Copa del Mundo en 1994, la MLS jugó su primera temporada en 1996 con solamente 10 equipos.
A partir de entonces, la MLS intentó reclutar a algunos de los nombres mas famosos del continente americano. Los casos más exitosos fueron Carlos Valderrama (Colombia), Marco Etcheverry (Bolivia) y Guillermo Barros Schelotto (Argentina). Al no lograr el éxito deseado, la liga intentó dar un paso estratégico en la formación de un campeonato competitivo con la contratación de jugadores franquicia como Juan Pablo Ángel (Colombia), procedente del Aston Villa de Inglaterra y el más sonado de todos, David Beckham (Inglaterra), proveniente del Real Madrid.
Solamente a mediados de la pasada década, la MLS logró establecer un nivel de competición respetado en el continente. Esto no ha de ser confundido con un sistema de competición respetado, pues tiene falencias de orden administrativo y logístico que aún no han podido corregir. La similitud entre los sistemas utilizados en otros deportes de elite en el país han imposibilitado su desarrollo.
En la actualidad, la MLS esta “reciclando” a algunos de sus jugadores más destacados con el propósito de realzar su liga y darle más prestigio. Ésta es la razón por la cual en agosto del año pasado uno de los jugadores norteamericanos más destacados, Clint Dempsey, fue transferido de al Seattle Sounders por cuatro años.
El jugador que más ha hecho para darle respeto a la liga, David Beckham, ya está retirado del fútbol activo. No obstante, no esta retirado del ámbito profesional y actualmente trabaja en la creación de una nueva franquicia con sede en Miami. La MLS le apoya incondicionalmente y le facilita la gestión, pues va en ritmo con sus intereses. Esta es una señal inequívoca de la intención de renovar y crecer al mismo tiempo.
La semana pasada, el mediocampista Michael Bradley, otro jugador insignia en el equipo nacional de Estados Unidos, fue vendido de la AS ROMA al Toronto FC como parte de un acuerdo bilateral entre las dos instituciones. Con este fichaje, la MLS ha hecho un nuevo llamado a sus fanáticos para que crean en su liga.
Los directivos quieren colocar la cereza al pastel contratando a una estrella de peso, como Xavi Hernández, ganador de siete Ligas, tres Copas de Campeones de Europa y dos Mundiales de Clubes, además de ser un referente histórico del equipo. Entretanto, Hernández, quien aún tiene dos años más de contrato con el Barcelona, ha manifestado su deseo de retirarse vestido de blaugrana.
Mauricio Villarreal
Gilda Delgado
