La decisión de cubrir las estatuas desnudas en los “Musei Capitolini”, por la visita del presidente del Iran Hassan Rouhani, se ha convertido en una cuestión de estado. Varios políticos romanos han definido el hecho como “un escándalo”, “una vergüenza”, “una censura” y han pedido directamente explicaciones al “Presidente del Consiglio” Matteo Renzi.

“En una rueda de prensa Rouhani afirmó que » los italianos tienen un gran sentido de hospitalidad y se lo agradezco», confesó de que no existieron contactos anteriores entre los dos países sobre esta cuestión y que nadie pidió de cubrir las estatuas.

Por su parte, el ministro de los “Bienes Culturales” italiano, Dario Franceschini, afirmó que la medida adoptada de cubrir las estatuas fue una elección que no tiene ningún sentido. Además, dijo que : “Ni yo ni el Presidente del Consiglio teníamos conocimiento sobre esta decisión”.

El juicio del Gobierno pareció unanime, todos los exponentes de los partidos políticos hablaron de indecencia, escándalo y ruina de la imagen del país. La “Sovraintendenza Capitolina” habló del hecho que la decisión no fue tomada por ellos y que este problema interesa solo y exclusivamente la “Presidenza del Consiglio”.

Dicho eso, que pasó entonces? En los ambientes del Gobierno se cuenta que las oficinas del ceremonial de Palazzo Chigi, del ceremonial del Estado, que responde a la Farnesina, juntos a los responsables del oficina diplomatica, han tenido diferentes inspecciones con los delegados de la embajada del Iran.

Los invitados demostraron varias dudas sobre la adecuación de algunas salas de los “Musei Capitolini”: no solo los desnudos, también algunos dibujos y cuadros en la “Sala degli Orazi”,la “Sala dei Curiazi” y los genitales del Caballo de la estatua de Marco Aurelio. Lo único cierto es que todavía no ha salido el responsable de la ultima decisión de censurar este patrimonio cultural italiano.

Paolo Aquilanti, segretario general del Gobierno Italiano, ha empezado una investigación interna para constatar las responsabilidades y dar todos las informaciones necesarias.

Hasta el dia de hoy no se conoce todavía el directo responsable del escándalo romano pero, de momento, 5 funcionarios del ministerio de los Bienes Comunes recibieron una sanción disciplinar. La acusación consiste en el pase de informaciones reservadas a la prensa.

Federico Titone

@fedetitone