Las dos promesas canadienses, que alcanzaron el número 1 en categoría junior, están llamados a ser el futuro del tenis en los próximos años
El futuro del tenis en Canadá parece estar en buenas manos. Denis Shapovalov y Félix Auger-Aliassime, de 19 y 18 años respectivamente, continúan creciendo a pasos agigantados y, como muestra de ello, alcanzaron esta semana las semifinales del Masters 1000 de Miami, derrotando contra pronóstico a rivales de mayor entidad y experiencia en el circuito.
Rivales dentro de la pista y amigos fuera de ella, ambos tenistas quedaron al borde de alcanzar la final del prestigioso torneo de Miami. Shapovalov, un año mayor que su compatriota, sucumbió en apenas 1 hora y 19 minutos ante su ídolo y el posterior campeón del torneo, el suizo Roger Federer (6-4, 6-2), en lo que suponía el primer enfrentamiento para el joven canadiense ante la leyenda suiza. El de Basilea no dio ninguna opción a un Shapovalov que no pudo desplegar todo el potencial que sí le había servido para vencer en rondas anteriores a rivales como el griego Stefanos Tsitsipas o el americano Frances Tiafoe, ambos también pertenecientes a la llamada ‘Next Gen’.
El mayor de los dos jóvenes canadienses ya se había presentado al mundo alcanzando las semifinales tanto en el Master 1000 de Canadá (2017), siendo el tenista de menor edad en conseguirlo, como en el de Madrid (2018), y tras el torneo disputado en tierras americanas asciende hasta el puesto número 20 del ranking ATP, su mejor posición hasta la fecha.
Por su parte, Auger-Aliassime se ha confirmado en Miami como el tenista que venía asomando desde hace unos meses. La joven promesa canadiense, que partió desde la fase previa, fue eliminando rivales a priori superiores como el georgiano Nikoloz Basilashvili y el croata Borna Coric hasta toparse en semifinales con el cañonero estadounidense John Isner, con el que perdió en sets corridos tras 1 hora y 54 minutos (7-6 [3], 7-6 [4]). Pese a sucumbir ante el gigante americano, Félix tuvo en sus manos alcanzar la que hubiera sido su primera final de Masters 1000, ya que en ambos sets llegó a sacar para imponerse, aunque fue precisamente ahí donde quedó patente su inexperiencia ante un rival mucho más experimentado como Isner.
Félix Auger-Aliassime, durante su participación en el Masters 1000 de Miami / Twitter: @MiamiOpen
Como premio a su meteórica progresión y tras convertirse en el tenista más joven en llegar a semifinales del torneo estadounidense con tan sólo 18 años, el canadiense se sitúa ya el 33º en el ranking mundial y asoma la cabeza entre los mejores en el año de su consolidación a nivel profesional.
«Es un momento realmente emocionante para ser parte del tenis canadiense. De muchas de las personas con las que hablo y de lo que estamos viendo, es la edad de oro del tenis canadiense. Nunca como nación, el tenis en Canadá, tuvimos tanto éxito en el más alto rendimiento«, señaló recientemente Hatem McDadi, vicepresidente de desarrollo de Tennis Canada.
Además, Aliassime destacó la amistad entre ambos como punto a favor para progresar de forma simultánea. «Los resultados que tenemos cada uno nos empujan mutuamente. Los dos tenemos mucha confianza en nosotros mismos y eso nos motiva. No creo que se pueda decir que tenemos una rivalidad, pero somos rivales y buenos amigos a la misma vez».