El Real Racing Club logró una de las mayores gestas de toda su historia. Después de perder en Villanueva de la Serena por 2-0, los de Viadero realizaron un notable partido que les sirvió para escribir una de las páginas doradas en la vida del histórico Racing. Los cántabros presentaron el mismo once que cayó derrotado en el Romero Cuerda a excepción de Israel Puerto, quien no entró en la convocatoria.
La ciudad de Santander se vistió de gala para acompañar a su equipo en el que podía haber sido el último partido del año. Más de dieciocho mil aficionados verdiblancos presenciaron el duelo entre los santanderinos y los extremeños. El recibimiento por parte de los seguidores de la escuadra cántabra fue espectacular. Bengalas, cánticos y mucha, mucha pasión. Los futbolistas entraron a Los Campos de Sport con la cabeza fría y el corazón ardiendo.
A falta de una hora para el inicio, el fondo norte de El Sardinero ya estaba lleno, animando a los suyos y creando una inolvidable atmósfera. Los cánticos y las emociones arrancaron una sonrisa a los jugadores del Racing antes de que comenzase el partido, y es que el estadio era una fiesta desde el calentamiento, dentro y fuera. La gente iba porque creía y los futbolistas sabían que se podía lograr algo épico.
La vuelta de las semifinales empezó con un Racing tranquilo y consciente de la duración del partido. La iniciativa no se le podía atribuir a ninguno de los dos equipos, pero los locales buscaban las bandas y la chispa que les caracterizó durante todo la temporada. Además, los racinguistas robaban muchos balones en la zona medular a través de Beobide y Granero, quienes se complementaron a las mil maravillas con sus compañeros a la hora de realizar las pertinentes coberturas.
Cumplidos los primeros veinte minutos, ninguno de los dos conjuntos había conseguido llegar con peligro al área rival. Había intentonas y acercamientos pero no disparos certeros. La pizarra de Ángel Viadero llevó a Granero al interior del área en un saque de banda para que prolongase el esférico con su altura, sin embargo, el capitán optó por un centro-chut cruzado que no iba nada mal.
Tan solo cuatro minutos más tarde, Beobide iba a estrenarse como goleador racinguista, y encima lo haría una cita trascendental. Santi Jara colgó el esférico con su clásica comba y la defensa lo despejó, pero el mediocentro vasco estaba en el balcón del área para hacer soñar a todo un estadio. El golpeo con el interior de Jagoba es bueno, toca en un defensa y mejora la trayectoria, toca en el larguero y se cuela en la portería de Wilfred. A falta de veinte minutos para terminar el primer tiempo, el Racing había hecho lo más complicado, marcar el primer tanto.
Los extremeños empezaron a ponerse nerviosos y pararon mucho el juego con faltas, algunas de ellas excesivamente agresivas. Granero demostró que está en un gran momento de forma, ya que realizó una de sus clásicas cabalgadas por el carril central. El Racing estaba bien plantado y sereno, sin prisa, sabía que iba por buen camino. Córcoles abandonó el fragor de la batalla después de un mal movimiento con su pierna izquierda. Gándara ocuparía su posición en el carril del dos. Los visitantes también tuvieron que realizar una sustitución, pero, antes, Aquino y Abdón pudieron marcar el segundo para el Racing justo antes del descanso.
El colegiado señaló el túnel de vestuarios después de las sustituciones y tras las ocasiones de los arietes racinguistas, a las cuales se sumó Beobide con otro disparo desde fuera del área que rebotó en otro zaguero y se fue a córner. Sin duda, el ex del Alavés estaba haciendo una tarea trascendental en las dos áreas. El Racing estaba cumpliendo el guión que tenía en mente, pero debía apretar los dientes en la segunda parte para lograr la remontada.
Tras cumplirse el primer minuto de la segunda parte, el CF Villanovense empata el partido con un gol en fuera de juego, pero el colegiado, muy acertado, anula el tanto de los extremeños. Dani Aquino, que se encargó de alentar a los aficionados durante la semana a través de sus redes sociales, demostró que lo suyo no son solo goles y florituras. El talentoso murciano bajó en varias ocasiones hasta el mediocampo para robar el esférico a los villanos y activando a El Sardinero hasta límites insospechables.
La escuadra racinguista hacía daño en los aledaños del área de Wilfred aunque fuera con centros y jugadas rápidas que no se finiquitaban con disparos. Sin embargo, los visitantes empezaron a tener algo más el balón en la zona medular, algo que no le venía tan mal al Racing, porque en cualquier robo y en cualquier despiste podía llegar el segundo. La banda izquierda de los cántabros empezó a funcionar muy bien. Héber se marchaba de su par con frecuencia y buscaba continuamente el pase de la muerte hasta que decidió absorber a su lateral y al extremo, facilitando la subida de Julen Castañeda. El lateral vasco se incrustó en el área con mucha categoría para introducir el balón en la portería con un certero disparo cruzado. La eliminatoria estaba empatada y la fiesta había comenzado. El tanto del defensa donostiarra llegó en el ecuador del segundo periodo, donde se suelen decidir los partidos repletos de locura.
Tres minutos después, el guante derecho de Santi Jara le puso un fabuloso centro a Abdón Prats, quien cabecea desde el punto de penalti al balón para meterlo por la escuadra izquierda del marco defendido por Wilfred. El potente delantero balear adelantaba al Racing, conseguía el tercero e incendiaba las gradas de los Campos de Sport con su grandioso e inolvidable testarazo. Viadero no dio tregua a su rival y doscientos segundos más tarde, Santi Jara recibe una buena pelota peleada por Abdón para que logre el cuarto y definitivo tanto en una tremenda jugada individual. El Racing había conseguido levantar un paupérrimo partido de ida con una fantástica remontada en su casa, donde solo reina él.
Con los deberes hechos, Álvaro Peña, que estaba preparado para sumarse a la fiesta desde hace algunos minutos, salió por Abdón y, poco después, César entraba por Santi Jara para derrumbar El Sardinero con el regreso de un futbolista importante que tendrá su oportunidad en la siguiente eliminatoria. Desde el cuarto y último tanto racinguista, los aficionados de todo el estadio no dejaron de hacer la ola, embelleciendo la histórica hazaña que había realizado el equipo de sus amores.
Tras el pitido final se veían lágrimas de alegría, se escuchaban gritos de emoción y se intuía, a través de los rostros de los futbolistas, una de las mayores gestas que hizo un equipo de fútbol en los últimos años. Todos los que estuvieron allí presentes podrán presumir de lo grande que es el Racing y de lo mágico que fue todo lo que aconteció durante esas dos horas del 11 de junio de 2017.
El Real Racing Club se enfrentará al FC Barcelona B en la final de las finales. El encuentro de ida será en Los Campos de Sport de El Sardinero el domingo 18 de junio a las 18:00 y el de vuelta tendrá lugar en el Mini Estadi el domingo 25 de junio a las 20:00.
En el programa de esta semana:
-Juan Carlos Pedraza, ex futbolista del Racing en dos etapas, repasa sus años en Santander
-Borja Granero, capitán del Racing que cumplía 100 partidos de liga con los verdiblancos, resume lo vivido en Los Campos de Sport
-Héber Pena, muy activo durante todo el partido del Racing, sabe que aún queda lo más bonito
-Dani Aquino, el alma de la delantera del Racing, dice que el equipo no cometerá los errores del pasado
-Juan Banderas, mito del racinguismo, comenta cómo vivió el día más importante del Racing
-Bing Zhan Zhan, aficionado chino del Racing, cuenta su amor por el equipo cántabro
Colaboran: Pablo Arce, Víctor Salamanca, Antonio Ramos, Alejandro Rovira y David Serrano
Dirige y presenta Arturo Herrera