Lucía Cubelos
Marianella Morena, directora de la obra teatral “Muñecas de piel”, ha concedido una entrevista a Europea Media donde habla de la obra que estrena los días 8 y 9 de Octubre en los Teatros del Canal en Madrid, sus aspiraciones y la censura previa que tuvo su obra.
La representación está basada en un hecho real, la “Operación océano”, un caso de explotación sexual de una adolescente que tuvo lugar en el año 2019 en Uruguay, al encontrar muerta a una adolescente en un arroyo. Tras ello, la investigación encontró conversaciones en el móvil de la jóven y muestras de la explotación sexual a la que había sido sometida. Actualmente, este es el caso con el mayor número de implicados por este delito en la historia de Uruguay, sumando un total de 33 hombres. Años después, Morena trae a los teatros de Madrid esta historia, tras varias representaciones en Uruguay.
Lo primero que te quería preguntar es qué es lo que tiene de diferente esta producción con otras que hayas realizado.
Esta historia parte de un hecho real, de una noticia que me impactó y que se instaló en mí al leerla. Era plena pandemia cuando descubrieron el cuerpo de la chica que inspira la obra, y en ese momento se me vino una imagen a la cabeza: es ella desnuda, caminando por la ciudad como si fuera portadora de un arroyo, mojándolo todo a su paso. Al principio me intenté resistir a escribir sobre ello, pero había una tensión interna que no podía aguantar, y decidí hacer la obra. Me puse en contacto con un periodista que había liberado ciertos datos y comenzamos a trabajar en una investigación. Otra de las diferencias más grandes fue también que a diferencia de otras de mis historias, esto era en vivo, según iba escribiendo, esto iba sucediendo a la par en los juzgados de Montevideo, mis otras historias narran hechos ya terminados.
He leído que tuvisteis unos problemas con los padres de la chica de la noticia a la hora de estrenar la obra, primero no querían que se utilizara el nombre, y luego pusieron más y más dificultades hasta que os llevaron a los tribunales. ¿Qué fue lo que pasó realmente? ¿entiendes la figura de esos padres?.
Si, los padres no querían que se usase el nombre, aunque el nombre no lo usamos. Realmente no entendía por qué. Cuando hay un femicidio la gente sale a la calle con carteles con la cara y el nombre de la víctima. Además, el nombre de la chica de mi obra está en wikipedia. No entendí por qué en la obra de teatro no podía aparecer. Fue algo que yo discutí con mi equipo, unos querían usarlo y otros no, a mi personalmente, utilizar su nombre me parecía una forma de rendirle homenaje, los personajes nunca mueren, las personas sí. Finalmente no usamos el nombre, pero los padres vieron una imagen de promoción de la obra, y dijeron que hacía alusión al caso. Nos pareció disparatado porque el propio padre había entregado el diario de su hija al periódico, era público, y su historia también. Luego contactaron con nosotros y pidieron leer el texto y ver un ensayo de la obra, se lo negamos porque no presentaron ningún argumento para ello. Además, yo quería evitar reunirme con ellos para que no me dieran datos que después no podía usar, para protegerlos de alguna forma. Como yo me resistí a darles el texto, dos días antes de estrenar nos citaron en una audiencia, que salía favorable para nosotros. La madre lo único que decía era que ella quería que todo se terminara. Tras el estreno siguieron apelando y pidiendo los textos, y se derivó a otro tribunal. La siguiente sentencia fue de nuevo favorable para nosotros, y no solo eso, sino que además alegaron la importancia del arte y la cultura.
¿Dirías que esa “censura previa” ayudó a que la gente fuera a ver la obra?
Sí, todo lo que tiene que ver con el escándalo, morbo, lo real y lo no real… genera curiosidad. Gente que no va nunca al teatro quería ver lo que estaba pasando, les interesaba esta obra porque estaba basada en un hecho real, en una noticia que estaba saliendo en televisión.
¿Entonces dirías que te llegó hasta ayudar esa censura previa?
Sí, en un punto sí, lamentablemente, pero bueno, los escándalos generan una multiplicación.
¿Qué fenómeno se da para que quisieras convertir esta noticia en obra teatral?
Creo que la diferencia aquí fue la postura de la fiscal. Ella quiso ir a la prensa, decidió tener una presencia permanente en la prensa desde el primer momento, que no es algo típico, por lo menos allá en Uruguay. Cuando comenzó todo, la fiscal tenía 800 casos, y “Operación Océano” era uno más. Ella encontró ciertos componentes que podían generar interés en la población, y decidió comunicarlo de forma continua, y tuvo la suerte de que los medios la recibieron siempre, y fueron muy respetuosos con ella. Le hacían preguntas como por ejemplo “¿por qué es explotación sexual y no prostitución?”, no se puede decir prostitución porque la chica es menor, si hay un adulto que viene y le paga a una menor, no es prostitución.
¿He visto que la obra está catalogada como recomendada para 16 años o más, crees que la gente jóven, ya no sólo los jóvenes de 18 o 20 años, sino esa persona de 13, 14, 15 años, deberían ver la obra?
Sí, a mi me gustaría que viniera a verla la gente jóven en realidad. Yo la haría apta a partir de 13 o 14 años, igual no apta para todos los públicos por las imágenes que aparecen, pero tampoco sólo para mayores de edad. No entiendo por qué no está dirigida para menores, parece una contradicción. Los menores acceden a internet donde está todo liberado. Tenemos que aprender cómo lidiar con ello, y aprender que pueden ver unas cosas, pero que también pueden ver estas otras, y así podrán crear sus propias opiniones y reflexiones sobre lo que está pasando en el mundo.
¿No te han propuesto pasarla al cine?
Todavía no, pero si me lo proponen y es un buen proyecto, ¿por qué no?.
Y ya para terminar, si tuvieras delante a la chica de la noticia real, ¿qué le hubieras dicho, después de saberse toda la historia?
No sé, la hubiera abrazado. Cuando leí su diario pensé “ella hubiera sido una gran escritora”, era muy bueno su diario. De hecho, los audios que están en la obra están inspirados en él. Además, te das cuenta de cómo tenía la vida dividida en la imagen que tenía concebida para redes, la imagen de su familia, su relación con su cuerpo… y eso es algo tremendo para las mujeres. Yo a ella le diría que puedes ser tú siendo solamente una, no tienes que ser tantas.