Álvaro López
Se acerca el día 22 de diciembre, día el cual se celebra el sorteo de la Lotería Nacional de Navidad, eso significa que las calles en torno al puesto de «Doña Manolita» se llenen de personas para poder hacerse con un décimo, pero no es oro todo lo que reluce, ya que los demás negocios que comparten ubicación a la de Doña Manolita se han quejado al Ayuntamiento de Madrid debido a que estas inmensas colas hacen reducir sus clientes y por tanto sus ingresos para estas fechas tan señaladas.
La calle del Carmen en Madrid esta está empezando a verse la estampa habitual de estos años, y son las interminables colas hacia el puesto de Doña Manolita en Madrid. A pesar de generar grandes imágenes de familias felices con sus décimos comprados en esta administración no todos están tan contentos, y es que los propietarios de otras empresas y negocios de la zona han expresado su enfado al Ayuntamiento de Madrid para que esta imagen no se repita en este mes que falta para el sorteo.
Todas estas quejas son sobre todo porque al haber tanta gente, la misma tapa muchos escaparates lo cual hace que muchos negocios estén perdiendo hipotéticos clientes, y por lo tanto dinero que no entra en casa.
Tras estos años de pandemia, las ganas de visitar a Manolita ha crecido de forma exponencial, tanto es así que cada años se bate récord de personas de media que compran en Doña Manolita, la gerente del sitio, Concha Corona ha asegurado que ya disponen de personas a diario que trabajan en las colas para que estos atascos y acumulaciones de personas no afecte a nadie, pero se ve que no está teniendo éxito y que siempre están y estarán disponibles para el Ayuntamiento de Madrid y para la Policía de Madrid para poder solucionar estos problemas.
Desde que Doña Manolita abre a las 9 de la mañana y echa el cierre a las 9 de la noche se presentan las colas de gente enfrente de la puerta de Manolita debido a ese ansia que presentan para poder adquirir su número, el tiempo de espera puede alcanzar las 2 horas, algo totalmente inviable para la gran mayoría de las personas a pesar de que la administración dispone de 5 ventanillas para agilizar el camino, pero parece ser que a pesar de modernizarse y de intentar por todos los medios facilitar al máximo estas avalanchas de gente la realidad es que cada día que pasa las colas se repiten y no parecen tener fin.
A todo esto hay que sumarle a los vendedores ambulantes que intentar engañar a la gente asegurando que sus números son de Doña Manolita cuando en realidad no lo son, por lo tanto más problemas para la Policía que ya sus apariciones en la calle del Carmen empiezan a ser costumbre.
