La multimillonaria va a construir una planta de energía solar por valor de 850 millones de dólares con la que pretende autoabastecer sus instalaciones en California, incluyendo su sede principal. Esta planta, que tendrá una extensión de 1.300 acres, estará terminada en 2016 (en el condado de Monterrey) y pretende sumarse a una filosofía en pro de las energías renovables.
Para llevar a cabo todo esto, Apple se ha aliado con la empresa First Solar. La idea ha sido de Tim Cook, CEO de Apple, que también planea invertir 2.000 millones de dólares para convertir una antigua fábrica de cristal en Arizona en un centro de almacenamiento de datos. Este centro estaría también alimentado casi en su totalidad por energía solar. Esta jugada les ha ayudado a subir en bolsa las pasadas jornadas, y parece haber sido bien recibido por los accionistas de la compañía.
Esta sería la cuarta planta de este tipo de energía de Apple. Actualmente cuentan con dos, una en Carolina del Norte y otra en Nevada. Y es que, como bien dijo Cook en las conferencias Goldman Sach’s Technology and Internet: En Apple sabemos que el cambio climático es real. El tiempo para la acción es ahora. Estamos emocionados en hacer cosas que dejen al mundo mejor de cómo lo encontramos.
A parte de todo esto, en esa misma conferencia, Cook habló de los nuevos lanzamientos que se producirán en los próximos meses. Entre ellos están el Apple Watch, que pretende marcar la pauta en el mercado de los relojes inteligentes, y está prevista su salida para abril. Cook cree que el nuevo producto podría tener un impacto parecido al que tuvieran en su día las tablets y los reproductores de MP3.
Muchas son las medidas que viene tomando Apple en los últimos años para mejorar su huella ecológica, pero ¿tienen un buen fin o sólo el de mejorar su imagen?
Teresa Novillo
