Alejandro Felpeto y Manuela Dorronsoro. En el segundo día de la Semana de la Comunicación Álvaro Curiel visitó la Universidad Europea de Madrid para charlar sobre cine. Curiel trabajó durante doce años en The Walt Disney Company, la compañía de medios de comunicación y entretenimiento más grande del mundo. Actualmente está trabajando en distribución de Warner Bros, compañía estadounidense y una de las más grandes productoras de cine, música, videojuegos y televisión en el mundo.
Curiel comenzó la charla dividiendo el cine en cuatro pilares fundamentales: producción, el proceso de creación de una película; distribución, se puede resumir en la elaboración de la estrategia de comunicación; exhibición y prensa, donde se encuentran los periodistas. Curiel estudió Marketing y publicidad y se encarga, dentro de la compañía Warner Bros, a la distribución. Cuando se termina una película comienza la distribución, sin embargo, explicó que lo ideal es empezar mucho antes, debido al enorme trabajo que esto requiere. “Estamos en una época en la que el público es más soberano que nunca, es imposible engañarle”.
La distribución en producciones locales sólo se encarga de la campaña, sin embargo en las grandes producciones trabajan codo con codo con producción y la parte artística, conocen el reparto y los guiones y dan opiniones para posibles cambios. Curiel califica cada película de obra artesanal y comenta que “en cada película hay que pensar que se está haciendo un traje a medida, ya que va dirigida a un público, determinado por distribución y producción. Para Curiel el gran problema de esta industria es la prisa.
Distribución se encarga de determinar la estrategia o el target, es el embajador de la película delante de una audiencia que todavía no la conoce. Habla de la necesidad de conocer a quién va dirigido el filme para poder tomar las decisiones correctas en comunicación y de llegar a un acuerdo con producción sobre la fecha de estreno, el posicionamiento o los puntos clave de venta. Cuenta el ejemplo de la película Al otro lado de la cama, cuando se estrenó decidieron que sólo se iba a emitir en salones con un aforo inferior a 200 personas, debido que a ser musical y tener comedia, la risa se puede contagiar y no permitiría continuar con el hilo de la historia. También se encargan de adelantar el presupuesto que se invierte en marketing. En la estrategia se incluyen los preestrenos, número de invitados, cuándo y dónde; cuándo se va a mostrar la película a prensa o si se va a presentar en algún festival.
Habla también sobre la diferencia que existe entre el cine y el teatro. En el teatro haces la campaña, tienes un aforo muy limitado, butaca que no vendes, butaca que no recuperas; mientras que en el cine, cuando compras una entrada, compras un componente humano y emocional.
Pilar Yébenes y Álvaro Curiel. Auditorio B, Universidad Europea de Madrid.