La Universidad Europea empató 3 a 3 el pasado sábado ante la Computlense en una nueva fecha del fútbol sala.
Los primeros cinco minutos del partido fueron un calvario para los locales, ya que a los 60 segundos de haber comenzado, un mal despeje defensivo toma atento al capitán de la visita que no duda en rematar fuerte y cruzado al palo más lejano del portero.
El partido estaba 0 – 1 y este golpe le iba a dejar secuelas al equipo de la Europea, que salió desatento y fue vulnerado una vez más, un minuto más tarde, tras una serie de toques cerca de su arco.
El dominio visitante siguió por varios minutos, aunque con menor éxito en la puntería. El técnico local apeló a varias modificaciones hasta ir encontrando a sus mejores hombres. La mejora se empezó a notar en la posesión del balón, con la que de a poco iban encerrando a la Complutense.
La primera parte finalizó sin más emociones que alguna entrada dura y discusiones entre la grada y algún jugador visitante.
En el segundo tiempo continuó la tónica del final de la primera parte, con los rojos dominando con la pelota e intentando descontar. El premio iba a llegar a los seis minutos, cuando el delantero, “Chemi” tomó un rebote en el área chica y dejó sin opciones al golero que había hecho una buena intervención.
La alegría no iba a durar mucho, ya que con el descuento en sus espaldas, los locales salieron a buscar el empate pero se olvidaron de la defensa y así lo aprovechó la Complutense, con una gran corrida de Alvaro, el número 8, que remató fuerte y alto, el balón pega en el travesaño y baja rápidamente, picando muy cerca de la línea de gol. El árbitro se decidió por conceder el tanto y desató las protestas de los rojos que debieron ser calmados por quien impartía justicia.
El partido se ponía 1 – 3 y no era justo con el trámite del partido. El cansancio empezó a jugar su papel en la visita que tomó muchas más precauciones a partir del tanto y no volvió a inquietar en ofensiva. A partir de aquí fue un concierto de pases de la Universidad Europea, que intentaba penetrar la muralla que proponía el rival.
A pesar de la superioridad, el tanto no llegó hasta el 16 de la segunda parte, donde otra vez “Chemi” iba a ser el punto final, de una serie de toques y basculaciones hasta encontrar el espacio.
El público se paró en las gradas y alentaba más que nunca a sabiendas de la proximidad que existía con la remontada. Los últimos minutos del encuentro fueron muy trabados, con muchas infracciones, discusiones y algunas tarjetas por parte del árbitro que tuvo una aceptable actuación.
En los suspiros finales, la Complutense proponía un bloque defensivo, intentando detener a la Europea que, ya sin portero, se tiraba todo adelante para buscar la heroica. Luego de una serie de toques, de un lado a otro de la pista, Felipe, el capitán locatario, decide rematar fuerte y raso, encontrando la pierna de Alfonso que desacomoda al portero y consigue la igualdad. Gran festejo en la tribuna, así como en cancha, ya que se alcanzaba un empate con otro sabor luego del trámite del partido.