El pasado 10 de marzo se ha celebrado un debate “Brexit y sus posibles consecuencias para España” que ha contado con la participación del embajador del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, Hugh Elliot, así como Belén Romana la consejera del Grupo Santander, la reconcoida periodista de TVE Anna Bosch y Federico Steinberg, principal investigador del Real Instituto Elcano. Un debate dinámico que ha sido dirigido e introducido por el director del Instituto, Charles Powell.
Un debate que como su propio título indica ha estado centrado en como afectara la salida de Reino Unido de la Unión Europea en los próximos años. El embajador Elliot ha dejado clara la postura del gobierno británico desde el primer momento. Para el embajador “la salida de la UE ha sido una decisión política que tiene como objetivo una mayor soberanía”, una realidad que va en contra de la importancia que han ido cobrando en el mundo las organizaciones supranacionales y que su mayor símbolo de éxito fue la fundación de la Unión Europea.
No han tardado en manifestar sus posturas antagónicas a las expresadas por el embajador los demás ponentes, la periodista Anna Bosch ha remarcado el empeoramiento a nivel social que ha traído está salida de la Unión. Belén Romana recogía sus palabras y cree que si a día de hoy volviera a celebrarse un nuevo referéndum el resultado sería un no, una afirmación que actualmente no sirve de mucho ya que estamos inmersos en el llamado “periodo transitorio de salida”, que permite a los británicos mantenerse en el mercado europea mientras las negociaciones con Bruselas siguen su curso.
El énfasis por la preocupación económica respecto a los futuros acuerdos de mercados entre Europa y Reino Unido están a la orden del día ya que forman el eje central de las negociaciones que se están llevando a cabo, el sector financiero es muy importante para las dos partes. Aun así, la voluntad de negociación y de una próxima llegada a un acuerdo bilateral marcan el eje de este proceso político.
Esta encrucijada en la que se encuentra Europa no es una excepción a nivel mundial, ya que en estos últimos años las medidas proteccionistas se están popularizando. Algo que es contraproducente para la colaboración entre Estados y la construcción de organizaciones internacionales de colaboración como la Unión Europea. Los Estados cada vez son más reacios a ceder su soberanía por un bien común mayor y el Brexit es la viva imagen de ello. Las respuestas respecto a las consecuencias que tendrá el Brexit realmente son desconocidas, veremos a donde lleva al Reino Unido, cómo que reestructuración vivirá la Unión Europea en estos momentos de debilitamiento, y también de incertidumbre mundial donde el colaboracionismo en un mundo cada vez más multipolar y global crea nuevos desafíos y desconfianzas.
Markel Trecet y José María Martín