Después de que el Gobierno Sirio y el Consejo Democrático Sirio acordaran el despliegue del Ejército en las regiones de Kobani y Manbij para frenar la ofensiva militar turca en territorio sirio, Michelle Bachelet, Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos se ha pronunciado sobre la cuestión.
Según informa ‘El País’, la diplomática ha denunciado este martes que los ataques sufridos por la población civil siria son “indiscriminados” e “inhumanos”. Por culpa de la ofensiva del régimen de Bashar al-Ásad, más de 900.000 personas han tenido que abandonar su hogar desde el pasado mes de diciembre. De este grupos de exiliados, el 80% son mujeres o niños. La ONU ya ha calificado esta situación como la mayor crisis de desplazamiento desde marzo de 2011, momento en que estalló la guerra en Siria.
Bachelet ha lamentado que «familias enteras, algunas de las cuales han cruzado Siria de una punta a otra en la última década, se encuentran de forma trágica con que las bombas son parte de su vida diaria”. La Alta Comisionada de la ONU no entiende «cómo alguien puede justificar este tipo de ataques indiscriminados e inhumanos”.
La oficina que dirige Michelle Bachelet ha confirmado que los ataques recientes han causado daños en 10 instalaciones médicas y en 19 centros educativos. Además estos ataques han alcanzado los campos que se habían instalado para refugiar a los desplazados internos. Este hecho confirma que ya ningún punto de la región es seguro.
Bachelet también ha denunciado que «los civiles que huyen de los enfrentamientos se están acumulando en zonas sin refugios seguros y que se reducen cada hora que pasa. Y aun así siguen bajo los bombardeos. No tienen ningún sitio adonde ir”.
El número de muertos no para de crecer y desde la ONU temen que siga en aumento si no hay un cese de la tensión por parte de las dos partes. Es por eso que la Alta Comisionada ha reclamado el cese inmediato de las hostilidades. Además ha pedido más corredores humanitarios para que los civiles tengan más garantías a la hora de abandonar la zona del conflicto y puedan tener acceso a las ONG que ofrecen ayuda humanitaria.
Paralelamente a la declaración de Michelle Bachelet, la portavoz de su oficina, Rupert Colville ha respondido en Ginebra a si los ataques a civiles y a edificios protegidos por parte de Siria y Rusia han sido deliberados, a lo que respondió que «la cantidad de ataques a hospitales, centros de salud y colegios indicaría que no puede tratarse de algo accidental”.
Adrià Gallego Freitas
