Los tantos de Mata y Jorge Molina (2-1) acercan al equipo azulón al sueño de jugar en Europa
Un deseo que se puede hacer realidad. Un sueño del que no se habla en el Coliseum desde hace casi una década, pero que suena más fuerte que nunca en el sur de Madrid. Y es que este Getafe sigue haciendo méritos partido tras partido, jornada tras jornada, para estar donde está actualmente: en puestos europeos. Y más concretamente, entre los cuatro mejores equipos de la competición.
Lo demostró una vez más en el derbi madrileño, donde a pesar de verse un fútbol poco atractivo para el espectador, consiguió sumar otros tres puntos y dejar aún más tocado a un Rayo Vallecano que no consigue salir de los puestos de descenso. Tres nombres propios: Jaime Mata, Jorge Molina y Raúl de Tomás. Ellos fueron los encargados de perforar la meta rival. Los tres empezaron el partido con 9 dianas en sus cuentas personales y lo acabaron con 10 tantos, encabezando una jornada más la lista de máximos goleadores nacionales.
El conjunto getafense salió más ‘enchufado’ que su vecino y con ganas de dominar el balón, ese que algunos detractores dicen que no le gusta tener. En esas, fue Jaime Mata quien se convirtió en una auténtica pesadilla para los de Vallecas, encarrilando pronto la victoria azulona. Su gol llegó con intriga por una supuesta posición antirreglamentaria de Foulquier, autor de la asistencia al ariete madrileño, y cuya posición parecía algo más adelantada con respecto al rayista Álex Moreno. El colegiado Alberola Rojas acabó dando el tanto.
A partir de ese momento, se vio muy poco del conjunto de Míchel. Por momentos parecía incluso que los visitantes tuviesen una actitud apática, como si la necesidad de puntuar no fuese con ellos. Por su parte, el cuadro azulón hizo lo que mandan los cánones, esperar el paso de los minutos evitando posibles sustos en su área. Una consigna que parece forjada a fuego en el equipo de José Bordalás, lo que no riñó con el propósito de encontrar un contraataque con el que poder ampliar la cuenta antes de llegar al descanso.
La segunda parte siguió una tónica similar. El equipo franjirrojo aguantaba como podía con tímidas aproximaciones, mientras el Geta buscó sentenciar el choque. Sin embargo, cuando más lo necesitaba el Rayo, apareció el ‘salvavidas’ Raúl de Tomás. El ex madridista cambió la imagen de un cuadro visitante que pedía protagonismo. El delantero madrileño recibió un balón en la frontal, se dio la vuelta, amagó y finalmente lanzó un disparo certero pegado al palo de David Soria. Premio, por tanto, a la primera de cambio.
Pero poco le duró la alegría al necesitado conjunto de Míchel. Diez minutos después del empate llegaría el segundo tanto de los azulones. Se inició con una jugada individual de Portillo, que filtró para Mata y éste, desmotrando que si de algo peca no es de egoísmo, cedió para que Jorge Molina solo tuviese que empujarla a la red estableciendo el 2-1 definitivo. No se rindió el Rayo en su empeño de irse con algún botín del Coliseum, pero acabó resignado y asumiendo que la derrota pudo ser mayor si Ángel hubiese acertado en las postrimerías.
Vecinos y rivales. Realidades paralelas pero tan distintas. Alegrías y penas en la capital. En el sur de Madrid disfrutan, a escasos kilómetros sufren. Unos miran a la salvación, otros sueñan con Europa. Solo el tiempo y los resultados dictarán sentencia en mayo.
FICHA TÉCNICA
RESULTADO: GETAFE 2 – 1 RAYO VALLECANO (1-0, al descanso).
ALINEACIONES:
GETAFE: David Soria; Damián Suárez, Djené, Cabrera, Antunes; Maksimovic, Flamini, Foulquier, Portillo (Olivera, min. 73); Jorge Molina (Cristóforo, min. 83) y Mata (Ángel, min. 90).
RAYO VALLECANO: Dimitrievski; Tito, Velázquez (Pozo, min. 72), Ba, Amat, Álex Moreno; Comesaña, Imbula (Mario Suárez, min. 60), Trejo, Embarba (Álvaro García, min. 55); y Raúl de Tomás.
GOLES: 1-0, min. 28, Mata. 1-1, min. 58, Raúl de Tomás. 2-1, min. 68, Jorge Molina.
ÁRBITRO: Alberola Rojas (Comité castellanomanchego). Amonestó con tarjeta amarilla a Antunes (min. 32) y Damián Suárez (min. 81) en el Getafe, y a Mario Suárez (min. 89) en el Rayo Vallecano.
ESTADIO: Coliseum Alfonso Pérez. 11.207 espectadores.
